
Barbie genera sentimientos destructivos como ningún otro juguete.
Sí: la mayoría de los encuestados admitió con naturalidad que tortura
a la muñeca de distintas maneras: arrancándole la cabeza,
cortándole el pelo, calcinándola en el horno,
haciéndola volar hasta el patio del vecino.
María Mansilla en Página 12 - 03/2006
No hay comentarios:
Publicar un comentario